El llamado escudo social de 25 mil millones de euros para proteger a la gente de los estragos de la pandemia, no nos engañemos: ha sido gracias a la labor y dedicación de los ministros de Unidas Podemos. Si bien es cierto que si no ha sido más holgado, es por ese lado oscuro y liberal del PSOE que tiende a escuchar el siseo de la CEOE. El pasado lunes, Izquierda Unida aprobó un plan de cambios estructurales económicos que responde a la esperanza de sobreponer “al pesimismo de la inteligencia el optimismo de la valentía”.
Con la crisis financiera sin haber acabado para el 20% de la población española, el detonante de una nueva crisis como la de la covid19 requiere de, en primer lugar, situar la sanidad pública y de cuidados como pilares de la sociedad y que directamente repercute en la economía de las mayorías.
La oferta de propuestas ha sido coordinada por Carlos Sánchez Mato, el Políticas Económicas de Izquierda Unida. Se busca con ella una recaudación de 155 mil millones con una mirada a medio y largo plazo que permita un cambio en las estructuras económicas que según, la legislación, no dependería de Bruselas. Con la crisis financiera sin haber acabado para el 20% de la población española, el detonante de una nueva crisis como la de la covid19 requiere de, en primer lugar, situar la sanidad pública y de cuidados como pilares de la sociedad y que directamente repercute en la economía de las mayorías. La propuesta ahonda en apoyarse políticas centradas en los cuidados, el feminismo y la urgente emergencia climática.
Los cambios y medidas indicados en el documento ofrecen alternativas a los del discurso de “no se puede”. Entre ellos, aumentar un 20% el gasto en Sanidad, un aumento del 30% sobre el actual gasto en Educación y medidas de financiación como una subida de impuestas, pero a diferencia del 2008, por arriba, al 3% de la población pudiendo recaudar 57.680 millones de euros. Un incremento del 0.03% anual al 1% del impuesto a los depósitos que fuera a pagar por la banca. La lucha contra el fraude y evasión fiscal que permitiría ingresar 22 mil millones es otra de las necesarias acciones a tomar en nuestro país.
Reducir la deuda sin hacer perder poder adquisitivo a la gente, sin castigar ni empobrecer a los de siempre. Porque no nos engañemos hay dos formas de salir: por abajo o por arriba.
El gobierno encabezado por Pedro Sánchez y una mayoría de ministros del PSOE deben decidir como quieren ser recordados; si como el sucesor de Rajoy en recortes o el gobierno valiente que apostó por cambios estructurales de cara a un proyecto de país y en favor de la mayoría.
